Las necrológicas oficiales de los empresarios preferidos del mundo pasan por alto frecuentemente el hecho de que el primer artilugio de Steve Jobs no fue ni un iPhone ni un iPad. Su primer producto fue un dispositivo como un “silbato” que transmitía un tono por la línea telefónica que le permitía realizar llamadas gratis a través de la red de AT&T en los EE. UU. En este sentido Steve Jobs fue el antecesor de los mediadores de interconexión actuales.
En aquellos tiempos felices de la contracultura, los piratas estaban provistos de silbatos y estaban allí para obtener diversión y gloria. En la actualidad están provistos de servidores SIM o unidades SIM y están ahí por dinero real.
¿Cuáles son las nuevas tendencias en fraudes de desvío de interconexión?
Los patrones clásicos de los operadores de unidades SIM que utilizan ofertas minoristas para terminar llamadas a redes móviles en mercados maduros, se ha expandido a un grupo complejo de diferentes técnicas de fraudes de desvío que explotan las fisuras específicas de cada topografía.
En los maduros mercados europeos, la presión reglamentaria ha reducido las tasas de terminación móvil cargadas por el operador para terminar las llamadas. No obstante, de forma paralela, la introducción comercial de ilimitadas ofertas y avances tecnológicos como el multiplexado de SIM, también han llevado los costes de las unidades SIM próximos a 0. Esto significa que incluso a 2 o 3 céntimos por minuto, sigue habiendo un pequeñísimo margen para mediadores bien organizados. Los operadores móviles aún necesitan seguir supervisando para estar seguros de que sus ingresos por interconexión en declive no disminuyan con excesiva rapidez: una campaña de llamadas de detección que cueste varios miles de euros ¡aún puede ahorrar unos pocos millones de euros de los hambrientos defraudadores!
En los mercados emergentes de África, Oriente Medio y Latinoamérica, los operadores de red móvil todavía disfrutan de altas tarifas de terminación, a veces superiores a 10 céntimos por minuto. Esto significa que los márgenes de la unidad SIM son grandes... y atractivos. Los avances tecnológicos del multiplexado de SIM permiten a los defraudadores escapar a los sistemas basados en el umbral implantados en los sistemas de gestión de fraude más avanzados: tarjetas SIM fraudulentas intercambian emplazamientos, reciben llamadas, envían SMS, limitan sus llamadas a un número limitado de números B, etc., que les permiten escapar a casi todos los esquemas de detección. La única forma de proteger a un operador móvil sigue siendo las llamadas de detección clásicas ofrecidas por empresas como Araxxe y otras. En los países en los que la unidad SIM es un fenómeno ampliamente distribuido las campañas de llamadas deben ser grandes (en el rango de 100000 llamadas de detección al mes) para acelerar las detecciones y utilizar técnicas de cifrado para evitar la contradetección mediante sistemas de gestión de listas negras.
¡Más allá de la unidad SIM, aparecen regularmente nuevos esquemas de fraude!
Los defraudadores están volviendo su atención a los ingresos por SMS, cuyas tarifas de terminación aún son bajos.